Home / VALLE MEDIO / Choque múltiple en cadena interrumpe tránsito en el puente de ruta 250 entre Choele Choel y la isla

Choque múltiple en cadena interrumpe tránsito en el puente de ruta 250 entre Choele Choel y la isla

Un accidente de tránsito ocurrido minutos después de las 10:30 de este lunes obligó al corte total de la circulación sobre el puente carretero de la ruta 250, que conecta la ciudad de Choele Choel con la isla donde se ubican los otros tres municipios vecinos. El siniestro, de tipo múltiple en cadena, involucró a cuatro vehículos y generó importantes demoras en uno de los corredores viales más transitados de la región.

Según informaron fuentes policiales y testigos presentes en el lugar, el hecho se desencadenó cuando un camión que encabezaba una columna de vehículos redujo abruptamente su velocidad al ingresar al puente. La maniobra, no advertida a tiempo por los conductores que lo seguían, provocó una serie de colisiones por alcance en cadena.

El primer impacto se produjo cuando una camioneta Volkswagen Amarok, que viajaba desde General Roca con destino a Las Grutas, colisionó fuertemente contra la parte trasera de un automóvil Nissan Sentra, al mando de una mujer que se dirigía desde Neuquén hacia Luis Beltrán. El impacto desplazó al Nissan, que a su vez embistió la parte trasera de un Fiat Uno conducido por un hombre que unía Choele Choel con Lamarque. Este último vehículo, arrastrado por la inercia del choque, terminó colisionando contra el semirremolque de un camión Scania que circulaba por delante, con destino también a Lamarque y procedente de General Roca.

Afortunadamente, no se registraron heridos. Todos los involucrados resultaron ilesos, aunque se constataron daños materiales de consideración en al menos tres de los vehículos. Como medida preventiva, además de la presencia de la Policía Vial de Choele Choel, se hicieron presentes efectivos de la Comisaría 8va., personal del hospital local y bomberos voluntarios de la ciudad, quienes colaboraron en la regulación del tránsito y la limpieza de escombros menores en la calzada.

La circulación fue interrumpida durante más de una hora mientras se realizaban las tareas de relevamiento y remoción de los vehículos. Tras la finalización de los trabajos, el puente fue reabierto al tránsito, aunque las autoridades advirtieron sobre la necesidad de reforzar campañas de concientización vial.

Falta de distancia y conducción defensiva: claves del siniestro

El accidente pone nuevamente en evidencia una de las causas más frecuentes de siniestros viales: no mantener la distancia prudencial entre vehículos. En rutas, especialmente en tramos con flujo continuo como el puente de la ruta 250, esta práctica es fundamental para evitar colisiones por alcance. A velocidades moderadas o altas, la distancia de frenado aumenta considerablemente, y una fracción de segundo de distracción puede ser determinante.

“Cuando no se respeta la distancia de seguridad, cualquier frenado brusco se convierte en una trampa. El conductor pierde tiempo de reacción y espacio para maniobrar, y eso puede desatar un efecto dominó como el que vimos hoy”, explicó un oficial de tránsito presente en el lugar.

Además, el episodio refuerza la necesidad de promover la conducción vehicular a la defensiva, un conjunto de prácticas que van más allá del cumplimiento de las normas. Esta modalidad de manejo implica anticiparse a los errores ajenos, mantener una atención constante en el entorno, respetar los límites de velocidad y evitar distracciones como el uso del celular al volante.

Entre los principios básicos de la conducción defensiva se destacan:

– Mantener una distancia segura respecto al vehículo delantero.

– Adaptar la velocidad a las condiciones del camino y del clima.

– Usar correctamente los elementos de seguridad (cinturón, luces, espejos).

– Evitar maniobras agresivas y conservar la calma ante conductores imprudentes.

– Observar en forma continua para anticiparse a posibles riesgos.

Un llamado a la responsabilidad colectiva

Este accidente, aunque sin consecuencias personales, sirve como una advertencia clara: la seguridad vial depende de cada conductor. Respetar la distancia de seguridad no es solo una obligación legal, sino un acto de responsabilidad que protege vidas. En rutas con alto tráfico, como la 250, donde se conectan múltiples localidades, la prevención debe ser una prioridad constante.

Desde las autoridades municipales y provinciales se analiza la posibilidad de implementar campañas de capacitación ciudadana y señalización adicional en puntos críticos del corredor, con el objetivo de reducir la siniestralidad y fomentar una cultura vial más responsable.

Mientras tanto, el mensaje es claro: una conducción prudente, previsora y respetuosa salva vidas. Y en rutas como esta, cada metro de distancia puede marcar la diferencia.

Deje un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *